(Si eres de los too cool for school que odian las fiestas de diciembre solamente para desarrollar una personalidad que según tu te va a hacer mas interesante en sociedad, seguramente tuviste una infancia infeliz sin renos ni nieve. Y eres feo de sentimientos. Sigue leyendo a discreción.)
HO! HO! HO! AMIGOS!
Neta es la mejor época de todo el año. Permítanme elaborar: son vacaciones, hace frío (coat season!), tragas como primate sin remordimientos, hay pachangas casi diario con amigos, te dan regalos y a quién no le gusta un buen playlist temático del villancico?
Yo jamás me he explicado la razón por la cual en México D.F. no existe la cultura de los grupos-musicales-tipo-borbotones que van de casa en casa cantando canciones navideñas con el único propósito de esparcir y compartir el espíritu navideño. Probablemente porque Los Peces en el Río no sonarán jamasnunca mejor que con las inigualables voces de tus tías las Pandora, pero yo opino que es un buen proyecto para la Navidad del 2014.
A mi jamás me ha parecido un buen plan eso de juntarse a poner el arbolito. Es una chinga, nadie realmente lo disfruta y si no tienes buen ojo decorativo, parece que lo decoraron las Carmelitas Descalzas con varios rompopitos encima. Benditos sean Pedrito y Sarita que tienen buen ojo para colgar la esfera.
Mi mamá es una intensa con eso de las decoraciones. Cada año sin falta parece que Santa Claus, Frosty y el Grinch guacarearon su espíritu navideño en salas, comedores y baños. Es de las que si ve el pueblito nuevo con carroza navideña incluida, se lo compra – a pesar de que ya tiene suficientes pueblitos para colonizar un país tipo Latvia. Pero cuando llega el día de la cena navideña, todos bien felices viendo al Santa que sube y baja la escalera subir y bajar la escalera media hora todos como imbéciles apreciando la novedad.
El bacalao se merece un párrafo solito. Les cuento una historia así nomás bien rápidito de #cuandoviviaenNY. Siempre venía yo a pasar Navidad a México y después me regresaba a NY para NYE. Durante toda mi estancia en el país que me vio nacer, lo único que comía, desayunaba y cenaba era bacalao (y a veces relleno porque ammm) y luego, como buen compadre mexicano – y porque en NY solo comía pizza y hot-dog de a dólar- me llevaba mis 4 zip-locs retacadas de bacalao congelado. Si alguien de aduana esta leyendo esto, obvio es broma mi historia, la inventé nomás por convivir.
Las películas navideñas siempre han sido una parte importante en todas mis navidades. Básicamente 2: Home Alone y Love Actually. Home Alone la veíamos siempre el 25 de diciembre mientras nos recalentábamos el relleno (maravilloso poder decir esa linea sin que piensen que es albur) y luego Maculin Kulin se volvió adulto y drogadicto y entonces cambiamos a Love Actually. Bonita Orelia.
Una de las partes mas chingonas de estas épocas son los convivios. Ya sea convivio con los amigos de prepa, con la familia lejana, con los Godinez o una posada de borrachos, el ambiente siempre es tan alcohólico que uno no puede evitar pasarla bien. Que el intercambio, que el ponche, que el abrigo-tipo-Silvia-Pinal-en-posada-de-Pepillo, que la velita anexa con el acordeón con la letra de la de en el hombre del cielo porque llevamos 25 años cantando la canción y no nos la podemos pinches aprender de memorias...
Disfruten las fiestas! Disfruten a sus amigos, a sus familias, a Santa, los arbolitos, las nochebuenas, las noches buenas, el romerito, su relleno, saquen guantes y bufandas (please don’t color coordinate too harshly), y sean felices en sus Navidades! Y si toman, no manejen, no sean pendejos.
Les dejo un pequeño playlist a manera de regalo de mi para todos y cada uno de ustedes. (no les puedo dejar nada porque no se subir playlists a esta madre, ahí la tengo en Spotify por si la quieren)
VIVA LA NAVIDAD!!!